Con la aromaterapia en la residencia de ancianos Blanes se tratan las afecciones físicas y psíquicas mediante las propiedades aromáticas de diferentes aceites y esencias que han sido extraídas de diferentes vegetales. Durante la última sesión se utilizó el aroma de lavanda y eucalipto.
La metodología de esta sesión siguió la misma línea que las anteriores: contextualización en el aroma, masajes en las extremidades superiores, masajes faciales, ejercicios de estimulación de los sentidos, descubrimiento de aromas y dinámica de expresión de emociones.
Queremos compartir con vosotros un hecho distintivo, al término de esta sesión, la terapeuta usó las nuevas tecnologías para escuchar música y ver vídeos a petición de los participantes de la terapia. De este modo, tras el bienestar holístico proporcionado por los aromas, se animaron los residentes a cantar y bailar.
Carmen Garrones fue la impulsora de esta fantástica idea.