La correcta alimentación de las personas mayores es una parte fundamental para tener una vida saludable. El impacto de la malnutrición en este grupo de población supone, tanto si se trata de personas sanas o con patologías establecidas, un mayor riesgo de contraer enfermedades. Además, la aparición de deterioro cognitivo, anemias, dificultad para controlar muchas enfermedades y una aceleración de las enfermedades degenerativas, ya de por sí producen malnutrición.
No obstante, los cambios que se producen en el organismo con la edad exigen aumentar la ingesta de determinados nutrientes para mantener una alimentación equilibrada que cumpla con sus necesidades nutricionales. De hecho, en las personas mayores la alimentación cumple una función de prevención importante. La nutrición en la tercera edad contiene características especiales y debe seguir un patrón puesto que ayuda a mejorar la calidad de vida de las personas durante esta etapa de sus vidas.
¿Cómo debe ser la alimentación de un adulto mayor sano?
Hay que mantener una alimentación variada y equilibrada para asegurar un óptimo aporte de nutrientes y adaptar la energía suministrada al menor gasto energético que conlleva el envejecimiento y la reducción de la actividad física.
En general, las personas mayores necesitan una dieta de alta densidad de nutrientes lo más variada y equilibrada posible para garantizar que cubra todas sus necesidades. Así pues, se compensan las necesidades energéticas que van a la baja, pero aumentan las vitaminas y minerales a través de la comida.
En definitiva, una adecuada alimentación y la práctica regular de actividad física son dos pilares fundamentales para mantener un buen estado de salud en toda la población. Muy especialmente para este grupo de edad. En La Vostra Llar sabemos que la combinación de estos factores es clave para aumentar la supervivencia con autonomía y una buena calidad de vida, por eso cuidamos mucho su bienestar.